Fuente: 20minutos.es
Pese a que la Dirección General de Tráfico tiene como meta el objetivo cero víctimas mortales en carretera, siempre es bueno recibir datos positivos que anuncien la bajada en la siniestralidad de nuestras vías.
Este año, durante el verano, se han registrado 13 víctimas menos que en 2019, siendo la cifra más baja registrada desde que se tienen datos (202 víctimas).
Desglosando esta cifra, comprobaremos que la bajada de siniestralidad está reflejada tanto en el mes de julio como en el mes de agosto, con 3 y 10 fallecidos menos respectivamente.
En cifras globales, el total de accidentes se ha reducido un 7% y el número de víctimas hospitalizadas también se ha reducido en un 8%.
Estos datos fueron ofrecidos la semana pasada por el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, la subsecretaria del Ministerio del Interior, Isabel Goicoechea, y el director general de Tráfico, Pere Navarro.
Esta realidad se recibe con agrado ante el temor previo y la incertidumbre por el comportamiento que pudiera producirse en carretera dada la posible conducción impulsiva provocada por el estrés del confinamiento vivido.
Hay que destacar la reducción en el volumen habitual de desplazamientos, con un descenso del 9% y el acortamiento de las ditancias viajadas, lo que ha facilitado enormemente la gestión de la seguridad vial, evitando aglomeraciones y atascos.