Fuente: larazon.es
Ya sabemos que para el año 2035 no se permitirán la venta de vehículos nuevos de combustión dentro de Europa, aunque el mercado de la segunda mano sí tiene permitida la compra-venta después de esa fecha. Evidentemente los coches de combusitión seguirán circulando por las carreteras europeas durante décadas.
El comisario de Mercado Interior, Thierry Breton ha explicado en una entrevista al digital "Político" que en la claúsula de revisión de la normativa para 2026 convendría abordar "sin tabús" la posibilidad de que 2035 no sea la fecha definitiva para prohibir la venta de vehículos nuevos diésel y gasolina.
Bruselas, decidido a combatir el cambio climático, ha apostado por la implantación del coche eléctrico, situación que provoca la destrucción de 600.000 puestos de trabajo (en lo gigantes automovilísticos y en el ecosistema de los combustibles fósiles) y también provoca el aumento en la demanda de materias primas en la Unión Europea como el lítio (15 veces más), cobalto (4 veces más), granito (4 veces más) y de níquel (3 veces más).
Para cumplir con el objetivo del coche eléctrico en 2035 se necesitarán 7 millones de estaciones de carga, existiendo actualmente solo 350.000 agrupadas principalmente en Francia, Alemania y Holanda por lo que el resto de países tienen mucho camino por recorrer, ha recordado el comisario francés.
Por último, Breton recomienda a los fabricantes de vehículos a combustión que aunque en Europa se prohiban en 2035, podrán seguir vendiendo estos coches en otros mercados diferentes que no tendrán esta restricción.